El antílope sable o negro (Hippotragus niger) es una especie de mamífero artiodáctilo de la familia Bovidae. El nombre del género significa "caballo macho cabrío", y es debido a la similitud que existe entre los antílopes de este género con los caballos, y al mismo tiempo con los caprinos por la forma de los cuernos, largas orejas caídas a ambos lados de la cara, y su resistencia. Los otros miembros de esta subfamilia son el adax y los orix.
Se trata de antílopes de gran tamaño, patas largas, cuellos gruesos cubiertos de crin, orejas largas y móviles, formas redondeadas y una característica máscara facial negra sobre fondo blanco que está presente en todos los miembros de la familia. No obstante, al contrario que el resto, los sables son de hábitos arbustivos y prefieren el cobijo de la vegetación a los hábitos desérticos de los orix y el adax. Alcanza una longitud cabeza-cuerpo de hasta 2,45 m y su cola mide entre 40 y 50 cm. Además, su altura en la cruz oscila entre los 1,30 y 1,50 cm y llega a pesar de 200 a 240 kg.
Al igual que el resto de los miembros de su familia, son antílopes fuertes y resistentes, con poderosos cuernos y gran temperamento que luchan con bravura contra sus depredadores; esto queda patente en la forma que tiene de usar su cornamenta en cada caso, pues mientras que en las luchas sociales entre machos por posesión de las hembras o jerárquicas, ambos contendientes cargan el uno contra el otro de rodillas, mientras que al defenderse de sus atacantes, embisten apuntando con su cornamenta. Pese a sus formidables armas, al contrario que en el caso de los orix, los recentales no nacen ya provistos de cuerna.